Una historia de tradición
«La unión es la base de toda vida cristiana puesto que está íntimamente ligada a la caridad»
San Vicente de Paúl
La Congregación Union-Chrétienne de Saint Chaumond fue fundada en 1652 por San Vicente de Paúl y la Venerable Madame De Pollalion.
En 1630, bajo la dirección de San Vicente de Paúl, Mme de Pollalion funda una Casa de Caridad en Charonne, (un barrio de París, por aquel entonces), para acoger a chicas jóvenes.
Posteriormente, en 1648, San Vicente de Paúl reúne a siete damas alrededor de Mme De Pollalion para que se dedicaran a la formación espiritual y a la educación de la juventud femenina. Cuatro años más tarde, el 17 de octubre de 1652, se funda la Union-Chrétienne de Saint Chaumond.
Ya en el siglo XX, Madre Cécile Devrièse da un nuevo impulso a la Comunidad implantando varias fundaciones del Instituto, entre las que se cuenta la Casa de Madrid en 1960. Madre Cécile inicia una verdadera labor misionera que le valió el reconocimiento de Roma como Segunda Fundadora del Instituto, en 1982. Bajo su dirección las Casas se multiplican más allá de las fronteras de Francia: primero España en 1960, más adelante Portugal e incluso América. Esta iniciativa responde al anhelo de Mme De Pollalion de llevar la caridad a los cuatro puntos cardinales.
La Union-Chrétienne de Saint Chaumond en España
En 1960, las Religiosas llegan a Madrid y se instalan en la calle Rodríguez Marín 30, 28002 Madrid. Al principio sólo enseñaban francés a un pequeño grupo de alumnas bastante heterogéneo, siguiendo el modelo de enseñanza a la francesa.
Seguidamente se abrió un pensionado para «demoiselles et señoritas» de todas las nacionalidades, y al mismo tiempo se ofreció el servicio de media pensión para las alumnas externas.
Los padres de estas primeras alumnas manifestaron su satisfacción y su confianza en las Religiosas por el nivel de formación de sus hijas: el saber hacer de la Dirección, la eficacia del sistema francés, la calidad de la educación y la formación religiosa impartida por las Religiosas. Un año más tarde y gracias a la adquisición de una casa colindante, las Religiosas pueden ampliar el número de alumnas inscritas.
En 1985, el Centro de Madrid consigue la homologación tanto del Ministerio de Educación francés como del español; desde entonces nuestras alumnas pueden obtener los diplomas de fin de estudios de ambos sistemas educativos.
Los fundadores
San Vincente de Paúl
San Vicente de Paúl nace en Pouy, cerca de Dax, el 24 de abril de 1581 y muere en París el 27 de septiembre de 1660.
Es ante todo un apóstol con una gran fuerza interior cimentada en Cristo. Es también un hombre de acción y a la vez un alma contemplativa, llena de amor de Dios.
Para San Vicente de Paúl la Unión, estrechamente ligada a la caridad, es la base de toda vida cristiana. Comunicó este espíritu de Unión a Madame De Pollalion, una de sus colaboradoras más cercanas.
Madame de Pollalion
Mme de Pollalion, de soltera Marie Lumague, nace en París el 29 de noviembre de 1599 y muere el 4 de septiembre de 1657.
Una esperanza sin límites, una caridad profunda y una confianza absoluta en la Divina Providencia son las características de su espiritualidad. Su celo apostólico no daba tregua, hasta el punto que San Vicente de Paúl se vio obligado en algunas ocasiones a moderar sus deseos de emprender nuevas obras.
San Vicente entrega las Constituciones a Madame de Pollalion y a las primeras Religiosas en 1656, en presencia de la Reina Ana de Austria. En el siglo XVII el Hermano Lazarista Jean-André representó esta escena en un cuadro donde se reconoce a las Hermanas de la Union-Chrétienne de Saint Chaumond por su hábito.
Madre Cécile Devrièse
Jeanne Devrièse nace en Lille el 6 de noviembre de 1894 y muere en Poitiers el 29 de octubre de 1978.
Madre Cécile —un alma de fuego, que arde de entusiasmo por anunciar a Jesucristo— ejerció, desde su ingreso en el convento en 1918, una profunda irradiación espiritual en la Comunidad. San Vicente fue su modelo, y todos sus acciones se basaban en una intensa vida de oración. Su profundo amor a la Eucaristía nace y se nutre de la lectura y la meditación asiduas de las Sagradas Escrituras.
Madre Cécile Devrièse vuelve a Dios tras medio siglo dedicada al servicio de sus Hermanas como Superiora de la Congregación. En 1982 la Iglesia la reconoce como Segunda Fundadora de la Union-Chrétienne de Saint Chaumond.